Nieve de sangre

No siente nada. Corre, mas es imposible avanzar. La nieve cubre sus pies descalzos y se eleva hasta las rodillas. Su pequeño y delgado cuerpo se retuerce sobre el manto blanco y espeso que lo cubre todo. El frío ha mitigado el dolor de su rostro y sus costillas. Una valkiria destrozada en busca de ayuda en mitad de la noche.    

Nieve, árboles y silencio.

Una rama se eleva del suelo, a traición, y le hace tropezar con las fuerzas mermadas. A lo lejos, escucha a los perros que siguen su rastro. Se pone en pie pero cae arrodillada. Lleva su mano al vientre. La sangre que salpicaba la camiseta de su pijama, ahora resbalan por el interior de sus muslos. El olor les atraerá más y, entonces, estará perdida.

Unas luces se acercan con rapidez. Parece un coche. Agita los brazos y grita para que puedan oirle. Lo consigue. El vehículo para y dos hombres se bajan, provistos con una manta que colocan sobre sus hombros. Le ayudan a subir pero, no repara en que hay alguien más dentro hasta que escucha su voz.

—¿Crees que puedes huir de mi?

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10. Describe una pesadilla que hayas tenido, pero en tercera persona. Y sin expresar sentimientos. Ah, se me olvidaba: es de terror.

2 comentarios sobre “Nieve de sangre

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